• 20 de April de 2024
unicornio vomitando arcoiris

Como diseñadores, muchas veces nos encontraremos con clientes un tanto difíciles de complacer, ya sea por el precio, o que sus especificaciones son tan rígidas o, por qué no decirlo, sumamente extrañas que al final terminan perjudicando el diseño. Algunos clientes tienen a externalizar sus proyectos con diseñadores no profesionales (solo ejecutantes de softwares) cuyos precios suelen ser muy bajos, esto les da una mala idea de cuánto vale un diseño. No está mal que empieces con precios bajos, sin embargo cuando ya tienes experiencia y haces un buen trabajo está bien que subas los precios razonablemente claro está, dedícate a los clientes que saben y conocen lo que vales.

Preséntate como la mejor opción. Muchos otros creen saber de diseño que dan especificaciones bastante rígidas y quieren ver el diseño terminado antes de pagar. Aunque a veces te parezca que esta es la única opción, debes evitarlo como sea posible pues algunos podrían aprovecharse de ti robando la idea y luego utilizarla. Has que tus clientes te elijan por tu portafolio y no por un trabajo que ellos encarguen sin pago previo. Antes de comenzar un trabajo debes requerir un pago al contado, pues algunos clientes pueden ser muy lentos en pagar o no pagar nada en absoluto. Nunca envíes los archivos finales hasta haber recibido el pago total. Es súper importante planificar cómo se llevará a cabo el proyecto antes de comenzarlo. Pautar reuniones donde discutir todos los detalles del proyecto, precios y términos. Algunos clientes podrán tener el mal hábito de no darte los textos e imágenes necesarias.

Haz énfasis en la necesidad de los mismos para que el proyecto pueda proceder según lo pautado, asegurándote que sean los textos reales pues si no lo son probablemente terminaras cambiando el diseño original y perdiendo tiempo que no te será remunerado por nadie. El poder de convencimiento juega un papel sumamente importante a la hora de tratar con un cliente, especialmente con aquellos que te pidan cosas tales como copiar diseños ya existentes o unicornios vomitando arcoíris en un sol sobre una playa con una tipografía Comic Sans para el logotipo de un restaurante, es un ejemplo un tanto exagerado, pero no imposible. Tienes que estar preparado que estar preparado para convencer a tu cliente de lo que sea mejor para él, o al menos intentarlo.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Instagram